Foto vía ONU Mujeres
Ciudad de Mexico.- Hoy, 25 de noviembre, el mundo conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, una fecha marcada por la reflexión, el activismo y la búsqueda de justicia frente a una problemática que afecta a millones de mujeres en todo el mundo.
Proclamado por las Naciones Unidas en 1999, el 25N rinde homenaje a las hermanas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, activistas políticas de República Dominicana asesinadas en 1960 por orden del dictador Rafael Trujillo. Sus vidas simbolizan la lucha contra la opresión y el coraje de quienes enfrentan la violencia sistémica.
Una realidad alarmante
La violencia de género sigue siendo una de las formas de discriminación más persistentes. Según datos de ONU Mujeres, 1 de cada 3 mujeres en el mundo ha experimentado violencia física o sexual en algún momento de su vida. Durante la pandemia de COVID-19, los casos de violencia doméstica aumentaron drásticamente, resaltando la urgencia de crear sistemas de apoyo más robustos.
En América Latina, considerada una de las regiones más peligrosas para las mujeres, los feminicidios son una constante. Países como México, Argentina y El Salvador reportan cifras alarmantes, mientras las organizaciones civiles exigen medidas concretas y efectivas.
Movilización global
Este año, el lema de la campaña liderada por las Naciones Unidas es “¡Pinta el mundo de naranja!”, simbolizando un futuro libre de violencia. En múltiples ciudades, se llevan a cabo marchas, concentraciones y actividades culturales para visibilizar la problemática y exigir un cambio estructural.
En muchos países, las mujeres y sus aliados se visten de naranja o morado, colores que representan la esperanza y la justicia. Las redes sociales se inundan de mensajes, testimonios y llamados a la acción bajo hashtags como #25N, #NiUnaMenos y #EliminemosLaViolencia.
Foto vía redes sociales
¿Qué está en juego?
Erradicar la violencia contra las mujeres no solo es una cuestión de derechos humanos, sino también un paso crucial hacia sociedades más equitativas. Esto implica fortalecer las políticas públicas, garantizar el acceso a la justicia, y cambiar patrones culturales que perpetúan el machismo y la desigualdad.
En este 25N, la demanda es clara: ni una mujer más debe sufrir violencia por razón de género. Es un recordatorio de que la lucha no debe limitarse a un solo día, sino que requiere compromiso continuo de gobiernos, instituciones y ciudadanía.
¿Qué puedes hacer?
La eliminación de la violencia contra las mujeres comienza con la educación y la sensibilización. Participar en actividades conmemorativas, apoyar organizaciones que trabajan en la defensa de los derechos de las mujeres, y ser un agente de cambio en tu entorno son pasos concretos que pueden marcar la diferencia.
El 25N es más que una fecha en el calendario; es un grito colectivo por justicia, equidad y paz para todas las mujeres del mundo.